«A la luz de la creciente crisis mundial y la desinformación, ahora es el momento de proporcionar una respuesta unida y diligente para humanizar y reducir la sobremedicalización de los servicios de maternidad (Dahlen HG 2022)».
Me encanta leer, estar actualizada, busco, reviso y analizo todo lo que se publica en el área de maternidad. Existe abundante evidencia de alto nivel que muestra de manera mundial que la continuidad de la atención por parte de las matronas es rentable y conduce a resultados óptimos.
El modelo de atención de las matronas, utiliza recursos más eficientes y proporciona mejores resultados que otros modelos de atención de la maternidad y existe mucha evidencia que lo respalda. El proceso de humanización y la reducción de la medicalización de los servicios de maternidad, son demasiados lentos. Las intervenciones médicas en el parto en ocasiones son necesarias y salvan vidas, cuando están indicadas, pero son perjudiciales cuando se usan en exceso. El uso de la tecnología y las intervenciones se instauran rápidamente, pero me entristece que sean tan difíciles de des instaurar, a pesar de que exista evidencia de daño. El objetivo de intervenir en los procesos fisiológicos del embarazo y parto, es mejorar los resultados y la seguridad de las mujeres y los bebés.
Las consecuencias biológicas y familiares de esta medicalización no lo veremos en millones de años, sino en las próximas décadas. Es urgente proporcionar modelos válidos, que de manera multidisciplinar, puedan evitar las consecuencias de los modelos actuales.
